Elegí estudiar medicina porque creo firmemente que cada vida merece cuidado, respeto y atención. Como estudiante de bachillerato en medicina, me esfuerzo por formarme con responsabilidad, empatía y disciplina. Me motiva aprender no solo sobre el funcionamiento del cuerpo humano, sino también sobre cómo acompañar a quienes atraviesan momentos difíciles. Aspiro a convertirme en un profesional íntegro, que sepa escuchar, actuar con ética y servir con vocación a quienes más lo necesiten.